15.12.13

Orden y concierto en si bemol


Esto de que repitamos rituales se hace para poner un poco de orden en nuestras alocadas vidas. Tanto disparate, tanto desenfreno, que no lo entendéis.
Resulta que hubo un tiempo en que la gente celebraba sus propios asuntos cuando le daba la gana; se disfrazaban de payaso el treinta y uno de diciembre, se comían las uvas el quince de agosto ¡con lo verdes que estaban!. Una locura.
Incluso alguno decidía darse un baño en la playa con su hamaca y su sombrilla en pleno veinticuatro de diciembre, qué disparate. Hay gente así, de veras, hala a lo loco. Un despipote. El 24 está hecho para pasarte el día en la cocina preparando la cena como tiene que ser. Playa ni playa.
Así, por nuestro bien y para que no sea esto Sodoma y Gomorra nos han creado una agenda estupenda y bien organizada.

Y ahora qué toca: cenas de empresa y turrón. Que no te apetece. Pues te jo.

8.12.13

Vale, voy a adornarte

Por el milagro de mis entrañas y por la niña que aún queda en mí