Se
está tan bien así mirando las paredes blancas sin nada que te
perturbe. Sólo espero que él no tarde mucho en venir a aflojarme un
poco la camisa de fuerza.
Hola guapa , yo pensé que estabas meditando , ya que no se tu pero cuando yo miro al techo , es que estoy meditando ....ohmmmmmmmmmmm , creo que me voy a ir a dormir un poco la siesta , si ves que tarda mucho me avisas y yo voy a quitarte la camisa vale , besos de flor.
Es muy incomodo cuando te aprietan las cinchas.
ResponderEliminarEn esos momentos hasta los relojes duermen.
ResponderEliminarBesos.
Yo la tendría atada un ratito más.
ResponderEliminarLa tortura con cosquillas no está penada.
Muas
S
Vendrá...
ResponderEliminarBesos a ramilletes, amiga linda.
Hola guapa , yo pensé que estabas meditando , ya que no se tu pero cuando yo miro al techo , es que estoy meditando ....ohmmmmmmmmmmm , creo que me voy a ir a dormir un poco la siesta , si ves que tarda mucho me avisas y yo voy a quitarte la camisa vale , besos de flor.
ResponderEliminarCurioso texto. Me ha encantado.
ResponderEliminarMuchos hemos mirado las paredes pensando, pero poca gente sabe qué se siente en la mente de un melancólico.
¡UN SALUDO!