Tu nombre dura diez sorbos

Cuando te vas, mi niño

Este vacío que me devora sí las entrañas que nada ni nadie me calma vete por Dios. Este páramo cruel desconsuelo que no, que no quiero fiestas ¿es que acaso no ven que no está? Este silencio tan espantoso que me enloquece. Más. No no no pongas música que hasta el trinar de los pájaros se me antoja frívolo. Esta tristeza tan profunda.

Estas lágrimas por fin

Cuento de Navidad

Erase una vez una jovencita de pelos rojos ensortijados que vivía lejos de su familia allende los mares. Su vida transcurría entre fiesta y fiesta y algunos exámenes, rodeada de otros jovenzuelos de todas las partes del mundo. Se sentía tan feliz y realizada pues era su sueño hecho realidad. Aquí si que me lo paso bien.

Y día tras día, a cual más bullicioso y trasnochado, llegaron las fechas navideñas. Tomó el primer avión rumbo al hogar aún cuando el sol ni siquiera bostezaba. Llegó y contaba y contaba a su madre sus increíbles hazañas cuando de repente apareció su desconsolado amante que tanto la había echado de menos. Dulcemente se dejó abrazar por su amantísimo Morfeo. Aquí sí que duermo bien.

Una gozada!

Anoche soñé que viajaba en una nave espacial turística a otro planeta. Con su salto interestelar y la sensación de velocidad, con sus cristales panorámicos que te permitían ver el amanecer del planeta mientras se acercaba la nave.

Hasta teletransportación desde la nave al lugar de destino que era una playa entre montañas todas de colores.

Me he levantado privada porque tengo en la cabeza un sinfín de imágenes alucinantes. ¿Tú también sueñas a lo bestia?

Con sólo hacer así me sacas los colores

AMARYYO

HAZZUL

rOJO!

VERD

NRNJA

ROS.A.

Yo ya no los cuento

Los sábados por la mañana suelo dedicarlos a organizar fotos, a preparar la ruta de los domingos, a garabatear y pintar y a asomarme a esta ventana bloguera para compartir inquietudes con ustedes.

A veces pongo música según me pida el cuerpo, pero casi siempre aprovecho el silencio que me brinda la soledad por un rato. Adoro la paz del silencio.

Otras veces, coinciden mis sábados con efemérides como hoy que es el día internacional contra la violencia de género. Mucho camino aún por recorrer. No podemos hacer macrocosas que están fuera de nuestro alcance más que maldecirlas, pero sí que a título individual desde nuestras casas, con nuestras parejas, con nuestros hijos podemos poner nuestro gran granito de compromiso. Cada uno que haga su examen de conciencia.

Y otras veces ocurre que el sábado coincide con mi cumpleaños y entonces, lo que hago entre pantalla y pantalla es cosechar, agradecer la vida y llenar mi corazón de cariñitos que recibo por doquier :)

lopillas en su ruta dominguera

yo iba para artista

Me ha venido un flashback de mi adolescencia y me he puesto a recordar las canciones que componía. Sí, compositora y cantante toma ya jajjaja, ¡ah! la edad de poder con todo.

Me he quitado la vergüencita (que ya me va quedando poca) y les pongo aquí algunas de las que me acuerdo. Con la música de la guitarra mejoran mucho eh! :D

Esta trata del día a día en el instituto, bendita rutina

Llegar casi dormida, monotonía del viaje

entrar entre hablas y risas, miradas buscando a ese alguien

Y una vez más otra mañana

otro primer cigarrillo y carcajadas por nada

Y subir las escaleras de siempre

llegar a la misma aula y ver a la misma gente

Rutina rutina rutina rutina

Bajar corriendo entre ratos

reunirnos en el mismo banco

y ver a ese alguien de siempre

que siempre nos coge mirando

Y una vez más otra mañana

otro cigarro encendido y carcajadas por nada

Y esperar a ver si algo nuevo pasa

con la sonrisa en la boca y después de nuevo a casa

Rutina rutina rutina rutina

Y esta tiene que ver con los amores platónicos. Ay qué sufrida era jajaja

Yo, mujer

me declaro ante ti, varón

En silencio te he de querer

pues ser débil es mi condición

Tu silencio es mi dolor

El amor que yo te doy

El cariño que hay en mí

La esperanza de tu amor

No me canso en repetir que te quiero a ti varón

Yo que estoy sin consuelo por estar sin ti

Me pregunto tú qué pensarás

Si recuerdas aquella mujer

que por ti llorando estás

Lo que sufro yo por ti

Lo que queda por sufrir

Sólo puedo repetir que te quiero a ti varón

Un día de estos quedo con las muchachas y aparezco por sorpresa con la guitarra para recordar viejos tiempos!

Ideas para pasar el domingo

Como si no quisiera, mi relieve esculpido en el sillón dibujará volutas de humo con tu nombre una y otra vez hasta que se tatúen en el techo. Como si no pudiera, grabaré las conversaciones que no tuvimos que no tendremos, cobardes acomodados. Navegaré frustrada en ceñida por tus palabras por tus silencios en el velero preso de peana como si no pudieras. Como si no quisieras.

De boncho

Quedaron el rosa, el naranja, el amarillo y azul. Tocaron al timbre del verde esperanza y dijeron al unísono “baja, que ya está bien de gris”

cobaya

Se felicitaba a sí misma porque las voces interiores de su cabeza eran positivas. Nada de tienes que matar a aquél que encarna el mal ni Dios te ordena una masacre por el bien del mundo. Eran conversaciones filosóficas unas, mundanas otras y las había hasta divertidas. Uno de ellos, el del acento marcado, parecía estar en contra de los demás ejercitando su autoridad. Ni caso decía. Otros, el kinki y su novia, llevaban la voz cantante pero de buen rollo, con su fino humor. Y luego estaban los espontáneos que a medianoche cuando todo estaba en calma metían baza en las disertaciones, muchos de ellos apenas audibles. Un corrillo interesante.

Cuando lo contó, la tupieron a antipsicóticos hasta la rabadilla.

Nunca supo, pues se descubrió hasta un siglo después de su muerte, que aquello eran ensayos precursores de la telepatía.

Aquí, en mi pecho

Anoche de madrugada sentí intensamente como te acercabas furtivo con tus piecitos menudos y subías a mi cama. Con mis cinco sentidos te tuve otra vez. Te olí, te escuché, te vi, te palpé y con un beso largo te saboreé.

Luego, al abrir los ojos emocionada, la más vacía soledad.

Explicaciones que nunca daré

Bueno, no es así exactamente. Resulta que me estaba comiendo un bocata cuando se me cayó un trozo de tortilla sobre el regazo y fui a limpiarlo cuando le di un golpe al móvil y al agarrarlo precipitadamente para evitar que se me cayera te dí un me gusta.

#Parlem

Coetáneos

Mientras me fumo un pitillo, me llama la atención la gota de agua en el patio de Krakow porque juraría que ya estuvo en el tendedero del mío. Ha visto tantos patios, me dice.

Así como la gota ha viajado por miles de fechas y lugares en el almanaque de la Historia, a ti y a mí nos ha tocado compartir exclusivamente este preciso espacio y tiempo. Haciendo nuestra propia historia. Ya es casualidad.  

Despierta

Necesito ese abrazo que algún día querré darte y ya no pueda

Me declaro loca

Isleña loca. Por la brisa del alisio, por la espuma brava, por las gaviotas que regresan al atardecer, por tu mirada.

Busco mis carcajadas. Razón aquí.

Ni las arrugas ni los kilitos mal repartidos ni las canas. Lo que de verdad de verdad no me está gustando nada de nada es la falta de carcajadas. Que tampoco es que vaya en modo estreñida por la vida, que me pongo si se tercia en un estado mental de “divertimento” y hasta esbozo alguna buena risa fácil pero, ¿dónde han ido a parar los dolores de barriga por reír sin medida?.

No me importa cumplir años y sumar todos sus inconvenientes, pero esto no me lo habían avisado. Me digo, será que ya no te ocurren cosas divertidas, pero no , es que ahora veo caerse a alguien y en vez de descojonarme, le pregunto si se ha hecho daño. Tan madura yo. De estas cosas no te avisan cuando eres pibita. Hazlo, hazlo ahora que ya luego dos al año. Hablo de la risa, pillines.

Mi teoría es que todo tiene su tiempo. Por ejemplo cuando descubrí Twitter tuve una etapa que me desternillaba y abandoné Blogger durante seis meses – os puse unos cuernitos-, ahora si acaso me sale una sonrisa mientras pienso lo piraos que estamos todos. El tiempo de la sorpresa y la novedad ya pasó. ¿Es el símil de la vida?.

Mis queridísimas suministradoras de carcajadas

Esta canción me pone en modo jijijaja. No dejen de oirla :)

Resiliencia

Me dice mi hija, impactada con sus pocas primaveras, que cuándo acabarán con el terrorismo. Le digo, con mis inviernos y mi dolor a cuestas, que siempre habrá odio disfrazado de cualquier forma en el mundo, que lo importante es mantener tu corazón del lado de la paz. 

Barcelona, Cambrils, bonitas, cúrense pronto. 

Tiempo de descanso

Sin horarias ni normas rígidas. De cholas y moño alzado. De no entrar en el cocino ni lavar la puñetera loza. De brisas y salitre, de senderas y pinocha. De mojitos y cervezo. Tiempo de vivir, tal vez volor.

Match

- Pues mira, tú no puedes ponerte asillas y minifalda con este calufón y yo paso frío y me muelo los pies la noche de fin de año. Empate.

- Y afeitarme cada día. Tremendo peñazo.

- Ah no, en depilación ganamos por goleada. Nos duele, ¿entiendes? Nos du-e-le.

- Sí, pero te depilas, haces una caidita de pestañas y ligas fijo. Nosotros tenemos que hacernos resistentes a la frustración y volver a casa más calientes que un macho.

- Y nosotras tenemos que hacernos resistentes a los moscones. Pesaos.

- ¿Sabes que el porcentaje de suicidios en hombres es más alto que en mujeres? Ahí lo dejo.

- Pues llora coñe. Y sal con los amigos para hablar de tus cosas en vez de fútbol y política, que te enteraste del divorcio de Quique a los dos meses.

- Ahora sacarás la baza del parto, claro.

- Yesitis. Strike! Si es que tenemos el cielo ganado...

Sonata triste

Yo también te amo. Que sueñes conmigo mi sol

Primicia

La última imagen enviada por la sonda Juno nos muestra el cauce de antiguos ríos, lo que podría significar la existencia de vida en el planeta Manitas.

Tengo una nube asomada a mi ventana

Encontré mi tornillo en el asfalto camino de casa pero ya no lo quiero, así que allí lo dejé. A cuatro pasos encontré la pinza que se me fue pero ya no la quiero, así que, prometiéndome no mirar más al suelo allí la dejé.

Encontré la nube con tu sonrisa que perdí esta mañana camino del trabajo.

Mi hibisco y yo

Un día que ha de llegar cuando menos me lo espere, oh sí, se abrirá del todo el cielo. Atrás sombras susurros apegos y embustes

Libres por fin mi hibisco y yo

no me busques.

Polvo de estrellas

Cuéntame bajito otra vez la teoría del Big Bang mientras señalas a las estrellas dentro de mí

Repetid conmigo

Despojaos de toda ropa y con el culillo saltarín al aire repetid:

Oh púrpura oh tinieblas oh negra oscuridad, llevaos mis estigmas y transmutarlos en dicha y pasión.

Oh púrpura oh tinieblas oh negra oscuridad, llevaos mis estigmas y transmutarlos en dicha y pasión.

Oh púrpura oh tinieblas oh negra oscuridad, llevaos mis estigmas y transmutarlos en dicha y pasión.

No prometo resultados, pero ¿y el fresquito?

linrísimo amapolo, no seas tan ingrrrrrrato 

y á ma meeee

Amén

No le pido a la vida más ni mejor. Le pido a la vida chispa suficiente para seguir buscando más y mejor. Le pido combustible para iniciar cada día con fuerzas y llegar a la cama agotada. Le pido energía para reir y energía para llorar. Le pido apenas me insufle un poco de luz para seguir recorriendo mi senda.

Del resto ya me encargo yo.

Buenos días

Al tercer sorbo se activa la primera neurona 

que despierta a la segunda

donde habitas tú