Anoche asistí con los ojos como platos, la sonrisa de oreja a oreja y las lágrimas contenidas a un despliegue de derroche mágico solidario.
Pincelada a pincelada, quedó pintado un precioso y rojo corazón que partió rumbo allá donde lo esperan con los brazos abiertos.
Benditos todos los que pintan corazones!
A mi me parece magnífico saber que parte de la humanidad es humana!
ResponderEliminarEstas cosas me hacen olvidar mi pesimismo con respecto a esta especie nuestra.
Muchos corazones laten, crean melodía, es fantástico!
Un beso
Lala
Si.
ResponderEliminarBenditos sean.
Besos.
Alegra saber que la ayuda llega, y que la gente ayuda.
ResponderEliminarUn beso, lopillas.
Tu siempre con la causa, eso te hace verable querida lopillas.
ResponderEliminarDeberíamos ser el 90% de esa manera.
besos grandotes
Yo tambien me uno a esa causa en defensa de los haitianos, pero no solamente por las desgracias fisicias y telúricas que sufrieron, sino tambien por la explotación que se hizo y se hace de ese pueblo que figura en el triste ranking de ser uno de los mas pobre del mundo.
ResponderEliminarCon cariño
Es hermosa la cadena solidaria que estamos creando a lo largo y ancho de este -maloliente- mundo, lopillas. Cuando el año pasado conocí a Cornelivs me "enganchó" con el Manifiesto. Tengo mucha suerte de compartir estas experiencias con gente como tú, tinerfeña :)
ResponderEliminarabrazos por malagueñas (de las dos)
jajaj ... pensar que se veia tan
ResponderEliminarlejano desde acá; y ahora nos t
ocó a nosotros. Bueno; cosas que
pasan. BESO <3
y a veces, cuando pienso en ese sufrimiento, como un aire de cólera me sube por todo el cuerpo. Cólera contra todos aquellos que pudiendo hacer algo para evitar males mayores no lo hicieron, incluidos sus gobernantes y nuestros gobernantes.
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