15.12.25

Feliz de eso

Esto de que repitamos rituales se hace para poner un poco de orden en nuestras alocadas vidas. Tanto disparate, tanto desenfreno, que no lo entendéis.

Resulta que hubo un tiempo en que la gente celebraba sus propios asuntos cuando le venía en gana; se disfrazaban de payaso el treinta y uno de diciembre, se comían las uvas el quince de agosto ¡con lo verdes que estaban!. Una locura. Incluso alguno decidía darse un baño en la playa con su hamaca y su sombrilla en pleno veinticuatro de diciembre, menudos locos. Un despipote.

El 24 está hecho para pasarte el día en la cocina como tiene que ser. Playa ni playa. El 25 para hacer un bis por si te quedaste con ganas y el 31 para morirte de frío con el modelito brilli brilli. Ah, los Reyes Magos, ese corre corre por las tiendas para que te venga la inspiración. Lo bien que lo pasamos.

Así y para que no sea esto Sodoma y Gomorra nos han creado una agenda estupenda y bien organizada. Qué yupi. Estoy que no quepo en mí (y el día 7 de enero menos voy a caber).

Que no te apetecen polvorones o estás harto de tu cuñao. Que te apetecen unas torrijas y no el roscón de Reyes. Pues te jó. Recuerda, querido bloguero, que es por tu bien.



¡Felices Fiestas!

10.11.25

Tarea para las seis de la tarde


Preparar la lista de invitados para tu 100 cumpleaños




 

2.3.25

Mandalas por no ahogarla

Estoy harta de mis pensamientos, ahí todo el día barruntando miles de posibles escenarios a cual más escabroso. Qué te calles.

Que no quiero saber si moriré agonizando y con dolor o de un chimpún mientras duermo. Que si me quedo viuda ya lo gestionaré cuando llegue si no es que me voy yo antes. Que si un gran tenedor me echa de mi casa me voy a cagar en todos sus muertos pero es algo que en cualquier caso no está de mi mano. Yo todo esto lo sé y me lo digo, se lo digo, pero mi cabeza no se atiene a razones y ahí que insiste la maldita nuez. Dale dale dale.

Escribir, por ejemplo, está muy bien para sacar y mandarla un poquito a la mierda. Y utilizar el botón del off de los mandalas también. Noto que al cabezón también le gusta como ay menos mal que así puedo dejar de hablar un rato. Cotorra de las narices.

Y tú, qué haces para acallar el pensamiento?




2.2.25

Mi luz

Allí estás. En ese volumen que ocupa un hueco en la tercera balda de la estantería.

Y allá, en aquella canción que suena a lo lejos.

En la mitad de la película y en el anuncio del intermedio.

Aquí. Entre las comas y los puntos suspensivos... (aquí, justito aquí)

Y ahí. Sobre todo estás ahí. En la luz. 

Mi luz